Barbería de Matogrande
En este proyecto hemos abordado la ampliación de un negocio.
Javi y Marta, tenían muy clara la personalidad de su negocio y lo que ellos querían transmitir a sus clientes. Ese fue el punto de partida de este proyecto que quiso unir la estética original de la parte antigua, con un ambiente de carácter más industrial en su parte nueva, un soplo de aire fresco sin perder la esencia del local anterior.
Se unieron dos locales comerciales interiormente y se proyectaron piezas de mobiliario que reflejaron la personalidad de un barbero tan respetuoso con la tradición como innovador, Javi. Inspiró un ambiente a su imagen y semejanza, lleno de personalidad, carácter y rebosante de autenticidad, sin renunciar a la calidez, la amabilidad y la cordialidad, reflejo de quien cada día lo trabaja y lo inunda de respeto y amor por su profesión. Javi es un barbero moderno con una enorme cultura y respeto por la barbería tradicional, se formó y nutrió en ambientes de barbero auténtico. A la hora de decidir la imagen de su local lo tuvo claro “quiero que aparezcan guiños al barbero tradicional pero modernizado, no quiero copias de ningún local, quiero darle una imagen diferente, pero sin renunciar a la verdad de la barbería”. Y nosotros recogimos el guante con sumo gusto.
Fue relativamente sencillo abordar este proyecto, sólo hubo que seguir el hilo rojo que Javi desenmaraña, así, como por casualidad, como si no fuera cosa suya… como si no hubiera mérito alguno detrás de esa amabilidad interminable… Su peluquería es como él, clara, amable y sin pretensiones, honesta… y así se solucionó su interior, con materiales modestos llenos de verdad, con soluciones prácticas y enfocadas en dos direcciones, el trabajador y el cliente… la peluquería de Javi es un lugar tranquilo, en el que el hierro y la madera lo solucionan todo, y no hay más, porque no es necesario que haya más, el resto lo pone Javi, a él le falta vanidad para hacer de su barbería un escaparate y le sobra carisma para convertirla en lo que es, la barbería de Matogrande ¿para qué más?